Moratinos y su laberinto
Sólo en una cosa ha demostrado Moratinos en lo que lleva de Ministro de Asuntos exteriores; que es un gran diplomático que juega al desatino y a la metedura de pata de banco: ha vendido metafóricamente hablando su entrevista a El País y El Mundo nada menos que en un domingo. Lo que hasta ahora llevamos sabido de este pueril Ministro, es un repertorio de gansadas que no por duplicarse resultan más convincentes. Irritantes, si acaso.
Además de su repelente falta de patriotismo y de su sectarismo partidista, está claro que la política exterior española encomendada por mi presidente a tan irreverente diplomático, parte de considerar a los españoles y a los norteamericanos a un nivel mauritano. Ni el más ignorante de los países del Tercer Mundo, ni la más yerma opinión pública africana puede pensar que apostar de manera tan estúpida por el candidato perdedor en las elecciones USA dejará de tener alguna consecuencia, no precisamente negativa. Aún así quiere convencernos de lo contrario. Es más: se presenta a sí mismo como el hombre capaz de mejorar muchísimo las relaciones con los Estados Unidos, a diferencia de Aznar, que según este botarate lo hizo bastante mal y provocó un atroz antiamericanismo. Sería entre los amigotes de ese terrorista de salón como es Arafat y en los progres desnortados, como ZP. Pero decir que Aznar sólo obtenía fotos y que ellos, ZP y sus Desatinos, van a obtener resultados es ir más allá de la majadería para incurrir en la ofensa y en el desprecio a la inteligencia de cualquier persona con dos dedos de frente.
Resultados de la política del incomparable Desatinos: Marruecos aliado militar especial de los USA; cancelación de la instalación en Rota de la VI Flota; cancelación de los contratos de Israel con Izar (por eso está ahora con problemas, pese a que ZP dijo que él lo arreglaría sacando la varita de Harry Potter); público rechazo de Kerry a ZP incluso antes de su derrota; desprecio de Bush a la llamada de Zapatero, sin duda aconsejado por Moratinos. La consideración de España, tras la llamada de ZP en Túnez a la deserción de Irak de todos los países coaligados con los USA, está ligeramente por debajo de la de Francia. Y, encima, quieren presumir que las relaciones con Bush van a ser extraordinarias. Para alimentar esa esperanza, se permite recomendarle al reelegido Presidente norteamericano que suavice su relación con Fidel Castro. Es un milagro, sólo achacable a la molicie marroquí, que Mohamed VI no haya emprendido ya la segunda Marcha Verde sobre Ceuta y Melilla. Con un aliado como Moratinos, la victoria era segura. Esperamos que para cuando se decida, este diplodesastre sea ya un mediocre y olvidado funcionario cesante de los de antiguamente, que se dedicaban a pasear sin rumbo fijo, esperando volver al puesto, que nunca tuvieron que asignarle.
Además de su repelente falta de patriotismo y de su sectarismo partidista, está claro que la política exterior española encomendada por mi presidente a tan irreverente diplomático, parte de considerar a los españoles y a los norteamericanos a un nivel mauritano. Ni el más ignorante de los países del Tercer Mundo, ni la más yerma opinión pública africana puede pensar que apostar de manera tan estúpida por el candidato perdedor en las elecciones USA dejará de tener alguna consecuencia, no precisamente negativa. Aún así quiere convencernos de lo contrario. Es más: se presenta a sí mismo como el hombre capaz de mejorar muchísimo las relaciones con los Estados Unidos, a diferencia de Aznar, que según este botarate lo hizo bastante mal y provocó un atroz antiamericanismo. Sería entre los amigotes de ese terrorista de salón como es Arafat y en los progres desnortados, como ZP. Pero decir que Aznar sólo obtenía fotos y que ellos, ZP y sus Desatinos, van a obtener resultados es ir más allá de la majadería para incurrir en la ofensa y en el desprecio a la inteligencia de cualquier persona con dos dedos de frente.
Resultados de la política del incomparable Desatinos: Marruecos aliado militar especial de los USA; cancelación de la instalación en Rota de la VI Flota; cancelación de los contratos de Israel con Izar (por eso está ahora con problemas, pese a que ZP dijo que él lo arreglaría sacando la varita de Harry Potter); público rechazo de Kerry a ZP incluso antes de su derrota; desprecio de Bush a la llamada de Zapatero, sin duda aconsejado por Moratinos. La consideración de España, tras la llamada de ZP en Túnez a la deserción de Irak de todos los países coaligados con los USA, está ligeramente por debajo de la de Francia. Y, encima, quieren presumir que las relaciones con Bush van a ser extraordinarias. Para alimentar esa esperanza, se permite recomendarle al reelegido Presidente norteamericano que suavice su relación con Fidel Castro. Es un milagro, sólo achacable a la molicie marroquí, que Mohamed VI no haya emprendido ya la segunda Marcha Verde sobre Ceuta y Melilla. Con un aliado como Moratinos, la victoria era segura. Esperamos que para cuando se decida, este diplodesastre sea ya un mediocre y olvidado funcionario cesante de los de antiguamente, que se dedicaban a pasear sin rumbo fijo, esperando volver al puesto, que nunca tuvieron que asignarle.
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Declan Painkiller -
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